Friday, November 29, 2013

Casos "mujer de Madoff" en la vida real y en ficción

- La Pantoja: condenada -aunque sin cárcel- ella dice que por amor a uno de los epítomes más perfectos de la cultura del pelotazo, el cutrerío, la españolidad, la burbuja inmobiliaria y la corrupción precrisis. Este ha sido uno de los episodios más gozosos y sonrojantes de uno de los personajes más gozosos y sonrojantes de la historia de España.
- Maite Zaldívar: lo mismo que la Pantoja pero agravado además por el hecho de que fue ella con sus declaraciones sobre el dinero que llegaba en bolsas de basura la que inició involuntariamente la investigación del caso Malaya (sumado también a un programa de Salsa Rosa (o Dolce vita) en el que salían Jesús Gil y Julián Muñoz insultándose en directo y reprochándose uno al otro sus corruptelas y chanchullos. Su chifladura por salir en televisión acabó provocando su desgracia. Algún día se proyectarán esas imágenes en un museo).
- La infanta Cristina: se comenta por sí mismo. "Firma, firma que yo te aviso" si creemos la versión que dan ellos.
- Cate Blanchett en "Blue Jasmine": ejemplo purísimo del cine posterior a la crisis mundial, sería apasionante ver la reacción de la mujer de Madoff al ver esta película. 
- Caroline Channing en "2 Broke Girls": trasunto de una hija de Madoff, se arruina, es rechazada por su entorno social y acaba de camarera en el muy hipster (y caro) Williamsburg intentado sacar adelante un negocio de cupcakes (¿eso sigue teniendo futuro? Fue muy 2009-2010 reaccionar al derrumbe de todo el sistema económico y a la pérdida del trabajo montando una tienda de algo artesanal, cuqui, con banderolas y preferentemente relacionado con la comida. De todos estos negocios, los cupcakes fueron el emblema, hasta contar ahora con varios programas de televisión de esos que emiten en Divinity. Debe de tener algo que ver con el sentimiento de alienación que provoca el dinero -sobre todo perder el dinero- y con esa idea de hacer algo físico y hermoso que será enteramente tuyo y que ni Internet y la crisis no podrán arrebatarte. Otra cosa es que luego esos negocios triunfen; véase Bridesmaids).
- La familia de Marissa Cooper en "The OC": a la pobre Marissa le pasaba de todo. Una de sus peripecias fue que su padre fue detenido por fraude, y de ahí el subsiguiente enfrentamiento con su clase social, rabia hacia su padre, odio hacia la madre inocente o cómplice necesaria... todo sazonado con un ramillete de mohínes y sollozos de Misha Barton.
- La familia de Nate Archibald en "Gossip Girl": el pobre Nate descubría que su padre era un mangante, consumía cocaína en las escaleras de los rincones más selectos del Upper East Side, se quedaba sin casa, se peleaba con su familia y terminaba viviendo en un piso vacío antes de ser adoptado por la familia Humphrey, viviendo en ¡horror! Brooklyn y posteriormente enamorando a la pequeña de los Humphrey y a la amiga bohemia y concienciada.

Saturday, November 23, 2013

15 cosas de las que están llenas las novelas de Jane Austen

- De parientes incómodos que ponen a los protagonistas en evidencia.
- De caballeros que parecen caballeros pero luego no son tan caballeros.
- De cartas y notitas que denotan la grafomanía herencia del siglo XVIII.
- De vestidos corte Imperio.
- De mujeres cándidas, silenciosas y abnegadas que aguantan como Cenicientas todo el mal que hay a su alrededor y que, a diferencia de lo que ocurre en la vida real, reciben una buena compensación por ello.
- De paseos por el campo, picnics y tés al aire libre. En algún sitio leí una cosa interesantísima sobre el cambio de la Inglaterra de Jane Austen (luminosa, alegre) a la Inglaterra de las hermanas Bronte (tempestuosa, de interiores); achacaban el cambio a una microglaciación que se produjo en el siglo XIX y que hizo que el tiempo británico pasase a ser esa cosa victoriana lluviosa, húmeda y triste que reina en el imaginario colectivo.
- De gente ociosa que puede perder el tiempo en hacerse los rizos con tenacillas.
- De personajes cuya fortuna es precaria pero que a la vez están completamente incapacitados, socialmente y por ellos mismos, para ganarse la vida de ninguna forma posible.
- De fascinación por los uniformes.
- De alusiones a las colonias, a las Indias Orientales y a las Occidentales, como una cosa velada y lejana pero que puede sustentar la fortuna de familias.
- De guerras napoleónicas.
- De accidentes meteorológicos de inesperadas consecuencias.
- De alusiones a otras obras literarias.
- De viajes e idas y venidas: a Londres, a Bath, al mar...
- De bailes en los que la sociedad se celebra y reafirma. Es una gran desgracia y descortesía no saber/querer bailar.

Saturday, November 09, 2013

Hip, hip, hipnosis

Y ahora otro guiño voluntario o involuntario en películas de Woody Allen: Mia Farrow como la psiquiatra de los años 20 que utiliza la hipnosis para tratar a Zelig y siete años después como el aburrida ama de casa que es tratada de su tedio con hipnosis por un sabio de Chinatown.



Bonito, ¿verdad?

Thursday, November 07, 2013

En un espejo

La maratón Woody Allen en la que se ha convertido últimamente mi vida me ha hecho caer en la cuenta de esta imagen repetida, autohomenaje y guiño que se hizo el director cuando decidió remakear Match Point dos años después en forma de Cassandra's dream.



¿Ven? No sé si esta coincidencia es sobradamente conocida, pero a mí me ha encantado descubrirla. Desde luego demuestra que aunque juntes dos historias muy parecidas, un escenario similar y actores con idéntico volcánico atractivo sexual, hay una alquimia imposible de imitar e imposible de conseguir a propósito. Ay, hay muchas cosas en el mundo que son invisibles.