Tuesday, October 06, 2009

Looost

(Advertencia: Todo lo que a continuación se dice debe leerse única y exclusivamente si se ha terminado de ver la quinta temporada de Lost, a no ser que se quiera simplemente disfrutar de mi desordenada prosa y agudas reflexiones, en cuyo caso, adelante. Y pido perdón de antemano por el rollazo que voy a soltar, pero no he dicho nada y tengo mucha tensión acumulada).

Empecé a ver Lost al día siguiente de San Juan. Sabía que existía, que era buenísima, tenía amigos que la seguían y todo eso, pero hasta entonces no me había dado por ahí, y de hecho le tenía un poco de manía, había visto el primer capítulo y no me atraía nada, me daban igual, no quería verla. La noche de San Juan estuve en una fiesta en la que el 80% de las conversaciones giraban en torno a la serie, así que me dije “bueno, es hora de empezar” (licencia poética) y zas, al día siguiente nos prestaron la primera temporada , que cinco días después habíamos finiquitado, hice una visita a un amigo que tenía la segunda, tercera y cuarta en dvd y hasta hoy.

Yo no llegué virgen a Lost. Sabía un millón de cosas, además de que Hurley nunca muere. Sabía de la existencia de osos polares, del humo negro, de que todos los personajes estaban relacionados entre sí por curiosas coincidencias de su pasado, sabía que en cierto momento la serie giraba y en vez de flashbacks empezaba a ir hacia delante, sabía que había saltos en el tiempo. Mal, vamos, se pierde gran parte del efecto sorpresa, pero no puedo evitar recordar detalles de cosas que ni me van ni me vienen (sólo he visto los dos primeros capítulos de Los Soprano y sé que en una de las últimas temporadas el hijito de Tony intenta suicidarse. ¿Qué cómo lo sé? Yo qué sé, lo habré leido en interné). Es como cuando estábamos viendo el capítulo de Hurley en la primera temporada y dijo mi partenaire: “¿Y a este qué le pasaba, que le tocaba la lotería, no?”. Y es que la gente se equivoca, lo difícil no es aprender sino no aprender. Esto de saber cosas por adelantado roza tintes dramáticos si tenemos en cuenta que yo ya había visto, al menos dos fragmentos de la serie muy importantes, en casa de mis padres, con la Fox de fondo, esperando al inicio de Las chicas Gilmore.

-Momento importante que yo ya había visto antes de seguir Lost 1: El inicio de la tercera temporada, con Juliet en su casita de muñecas escuchando Downtown, la reunión del club de lectura y el avión que aparece en el cielo.

-Momento imporante que yo ya había visto antes de seguir Lost 2: El final de la cuarta temporada, con el carguero explotando y Sun gritando desde el helicóptero, desesperada ante la muerte de su marido (que luego no está muerto, pero esa es otra historia).

Mal, fatal. Y tenemos que tener aún más en cuenta que contábamos con las cuatro primeras temporadas en dvd, con lo que, en el momento terrible e icónico en el que Desmond le dice a Charlie: “Vas a morir, Charlie”, fuimos corriendo a coger la carátula de la cuarta temporada y comprobamos, al borde de la depresión, que Charlie no salía (y Míster Eko tampoco, pero eso ya nos daba más igual). En cualquier caso las cosas son lo que son, no se puede cambiar el pasado (fíjense qué bien traído) y cuando vi a Jin por primera vez ya sabía que iba a morir, y sin embargo creo que esto no ha mermado ni una gota mi enganchamiento por la serie. Y el caso es que no sé cómo ha hecho la “gente normal” para seguirla capítulo a capítulo semana tras semana y con intervalos de un año sin morir de ansiedad. Vamos, yo es que pienso en no verla en rondas de cinco en cinco capítulos y todo seguidito en el plazo de tres meses (con uno de descanso en medio) y me da algo.

Jack me cayó fatal desde el principio. Es un pesado, un tolilli, un agobiado, un repelente y feo, además. En la lucha sin cuartel entre fans de Sawyer y fans de Jack yo soy de Sawyer a muerte, porque ¡es el único que lee! , por razones de recreo visual y porque es autor del genial mote, dirigido a Sayid, de “Capitán Falafel”. Es que me troncho. Aunque la verdad es que me gustan todos, para qué engañarnos, con una especial debilidad por Charlie (al que se lo perdono todo, la locura con el mono, que sea un poco pringado al fin y al cabo), y si tuviese que elegir me quedaría con Desmond, cuya historia de amor con Penny me conmueve más de lo imaginable. El triángulo amoroso, después cuadrángulo Jack-Kate-Sawyer-Juliet me da bastante igual. Me la suda con quién se quede Kate, aunque la verdad es que parecían muy felices Jack y ella en Los Ángeles, follando todo el día como descosidos. Y se supone que el protagonista es Jack, al fin y al cabo, y esto no es “Dawson crece”.

El momento en el que me enganché, el momento en el que todo dio un giro y pasó a ser una fiebre y una obsesión, es esa escena de la primera temporada en la que Hurley se acerca a Jack para decirle que han encontrado la lista de pasajeros, han hecho cuentas y que ¡Ethan no iba en el avión! Y cambia el escenario y nos encontramos a Claire y Charlie caminando por la selva y de repente aparece Ethan y te cagas de miedo.

La primera y la segunda temporada me encantaron. La primera obvio, aunque luego la recuerdas y da la sensación de que, comparándolo con lo que vino después, no pasó nada salvo la muerte de Boone (qué pena, Ian Somerlander me encantaba desde aquella película con Shynnyn Sossamon, ¿qué habrá sido de ella? Esa chica prometía). Mi escena favorita de la primera temporada es un planazo aéreo que le dedican al barco en el que van Michael, Walt, Jin y Sawyer. La música, el mar, las velas al viento, unos hombres que se lanzan a navegar para encontrar la libertaaad, yo no necesito más. La segunda me chifló. Me gustaba mucho todo lo relacionado con Desmond y la escotilla, el tema de los números me tenía en vilo, los capítulos relacionados con los pasajeros de la cola del avión ralentizaban la acción y todo eso pero a mí me gustaban mucho, me encantó el capítulo llamado “los otros 48 días” (creo) en el que se narraba cómo los pobres Ana Lulú and company se enfrentaban a esos ataques nocturnos. Luego aparece Henry Gale y ya es la locura total, se siembra la duda y la cizaña, yo gozo como una perra, y ese regreso de Michael que a todos nos hizo gritar, cargándose a Libby y a Ana Lulú. Y el capítulo final, con la llave y la explosión. Jarl.

Con la tercera y la cuarta ya cambian las cosas. Y es que para mí ahí se rompe el que hasta entonces era un comportamiento perfectamente lógico y normal por parte de los personajes. No puedo entender que tengan a Kate y a Sawyer metidos en una jaula y que hablen con los otros y les digan “déjanos salir” en vez de “pero quiénes sois”. Creo que la curiosidad tiene que ser tan grande que no entiendo cómo no se ponen a implorarles que les cuenten quiénes son, qué hacen en la isla, por qué secuestraron a Walt, por qué secuestraron a Claire, qué poderes tiene la isla, qué pasa, qué coño pasa. El ansia de saber de esa gente que está sufriendo cosas tan terribles tiene que ser muy fuerte, tienen que intentar ententer, ¡intentar entender!

Yo no entiendo nada. Y con la quinta, si me pongo a pensar en las paradojas temporales del tipo de “si yo voy al pasado y mato a mi madre ¿llegaré a nacer algún día o me esfumaré en el aire o conviviremos dos yos de distintas edades o se desdoblará la realidad o todo ocurrirá tal y como estaba planeado desde el comienzo por un Ser Superior?” me da un dolor de cabeza terrible. Se supone que algunos enigmas de van resolviendo poco a poco, como lo de los osos polares, que se supone que los tenían los de Dharma en la islita pequeña para hacer experimentos con ellos, metidos en las jaulas en las que están luego Kate y Sawyer. Pero no me quedo tranquila. Una parte de mí quisiera que hubiese algo tipo “Se ha escrito un crimen”, en el que Jessica Fletcher empieza a contar cómo ha descubierto al asesino y se ve una recreación de los hechos para que quede todo clarito y bien clarito. Ya, ya sé que entonces no sería tan buena la serie. Es que jo, qué buena es. Qué bien hecha está, cuánto dinero ahí gastado (comentario de albañil), qué planazos, qué actores, qué guión, qué diálogos, qué historia. Qué fondo tan filosófico y profundo, cómo hace que reflexiones, que te preguntes a ti mismo lo que piensas sobre el destino, la vida, la muerte y las paradojas temporales así en general, y ya se sabe lo importante que es saber lo que uno opina sobre las paradojas temporales. ¿Es Lost la mejor serie de la historia? Pues casi casi diría que sí; una de las mejores, desde luego.

Quiero saber de una vez si es verdad que los guionistas lo tenían todo atado y bien atado desde el principio. Que se supone que sí, pero entonces a cuento de qué vienen declaraciones como las de Michael Emerson (Benjamin Linus) diciendo que “hace tres años volé a Hawaii para un papel episódico y ha terminado convirtiéndose en el papel de mi vida”. Espero que de verdad lo tengan todo pensado desde el principio, aunque veo imposible que en una sola temporada logren explicar tantos enigmas, o al menos los principales. Con que no sea todo un sueño de Jack me conformo.

Quiero saber por qué los Otros necesitan líderes. ¿Por qué no es su líder Richard? ¿Por qué necesitan primero a Windmore y a Eloise y luego a Ben y luego a Locke si se les ve muy capaces de valerse por sí mismos? Si Richard da la sensación de que puede entrar y salir de la isla cuando quiera, y viajar en el tiempo (amén de ser eternamente joven, como Mel Gibson), y habla con Jacob, en serio, ¿por qué necesitan líderes?
Tengo un amigo que dice que el gran misterio de Lost es cómo es posible que Sun aprendiera a hablar inglés en sólo cuatro meses si además la mitad de las clases se las pasaba follando con el profesor. Para mí el gran misterio de Lost es cómo es posible que Daniel Faraday sea heterosexual con ese buclazo de madre que tiene.

Y bueno, por qué. Yo creo que la gran pregunta no es cómo, si no por qué. Si se contesta un por qué satisfactorio a todos los interrogantes de la serie, da igual que todo bordee la cienca ficción más delirante, da igual que nos pidan a los seguidores una gran prueba de fe, da igual que haya cosas que bordeen el absurdo (como que Sun con su indemnización de la compañía Oceanic se compre la empresa de su padre. ¡Se compra un holding coreano! ¡Se compra la Daewoo!). Dará igual porque sabremos por qué existe la isla y por qué existe Jacob y su antiJacob y por qué necesita apropiarse de cadáveres para matar y por qué le quiere matar e infinitos por qués. ¿De verdad, por qué todo esto?


14 comments:

Anonymous said...

Eso me pregunto yo ¿Por quéeee?
A mí la serie me parece soporífera,ha sido mucho más entretenida tu entrada que las casi dos temporadas que me tragué con muy buena voluntad y pensando cada día que el siguiente pasaría algo medianamente interesante.
Y no es sólo que sea soporífera,es que es muy mala.Aunque den una explicación o lo que sea nada contestará a la pregunta fundamental ¿por qué esos patéticos diálogos y por qué esos tópicos y milvecesvistos (aburridos,aburridos,aburridos) personajes? Por mucha acción que pongan no consiguen distraer tanto como para no notarlo.
Que venga ya el deus ex machina y acabemos ya con tanto sufrimiento (mío,claro: sufro mucho estando en posesión de la verdad mientras hay tanta gente equivocada)

Deckard said...

Pues ahora para quitarte el mono puedes pedirle a algún otro amigo que te deje Galactica y pasarte estos meses amando a otro grupo de personajes casi más grandes que los de Lost.

mos said...

¿Galactica, estrella de combate?

JRB said...

Jack es un pánfilo convencido de ser un líder y un héroe. Es imposible no odiarlo. Y cuando le ponen barba y empina el codo es el peor actor dramático de la historia. A mí me ponen Ben, Juliet y Sayid. No sé que va ser de nuestras vidas cuando la serie se acabe.

Shannyn Sossamon salía en Dirt, era la novia fantasma del fotógrafo esquizofrénico. Y hace poco la vi en una peli llamada Wristcutters. Ian Somerhalder hace ahora de vampiro en esa serie de la CW tipo Crespusculo. No me atrevo a verla, no me atrevo.

Tilo said...

¡Avisaste de que ibas a hacer spoilers de Perdidos! ¡NO DE LOS SOPRANO!, justamente ahora, que estoy viéndola y voy por la segunda temporada... Te maldigo.

Deckard said...

Si mos, Battlestar Galactica, este remake ha sido de lo más grande, no solo en su género si no a todos los niveles.

Peibols said...

He llegado a aquí vía Facebook (muy teenager todo) y tengo que decir que me ha superencantado este post!
Me he reido mucho no, muchísimo!!

Lo de Sun y las clases de inglés me ha encantado. Que chachi.

Por lo demás sí a todo.
Excepto a Jack. El único momento que odié a Jack fue cuando se depiló el pecho. Perdió todo su encantado para mi.

Eso y que Juliet es la puta ama. Olé.

Ra está en la aldea said...

¡Es verdad, Shannyn Sossamon (no podía haber escrito peor su nombre)salía en Dirt (esa serie con una primera temporada muy divertida y una segunda temporada nefasta)! A Ian Somerhalder le viene que ni pintado el papel de vampiro. Pobrecito mío, ojalá tenga éxito y tal.
Ay, siento lo de los Soprano. Bueno, no es un dato terriblemente importantísimo, ¿no?
Lo de que Jack se depile el pecho es como para mear y no echar gota. Me pregunto cómo es posible que los de producción lo hayan permitido si se supone que todo el naufragio son unos tres meses o así. Es como cuando de repente, en la tercera temporada, Claire y Sun aparecen con flequillo en medio de la isla.

CLouD said...

Qué post!!!

Yo soy de los que lleva desde la primera temporada esperando semana a semana y año a año... y ya no tengo uñas, ni dedos, ni nudillos.

SisterBoy said...

Yo a estas alturas ya me he resignado a que es imposible que el final explique todas las incognitas. Piensa que es una serie seguida por millones de personas en todo el mundo y un gran porcentaje de ellas son autenticos nerds que se pasan el día tratando de desentrañar los misterios de los cuatro riscos.

Pues bien todos esos esfuerzos juntos no han logrado aún una teoría que no pueda ser rebatida tras examinarla cinco minutos. Estoy convencido de que estamos ante una versión televisiva de la estafa piramidal en la que las expectativas seguirán creciendo hasta que reviente el chiringuito cual Gestcartera.

Aún así habrá valido la pena.

El Malvado Ming said...

Tiene razón Deckard, Battlestar Galactica ers la mejor metadona para pasar el mono de Lost, claro que luego tendras mono de Galactica y eso ya no se quita con nada.

quitus said...

¿alguien es capaz de aguantar 5 temporadas de una serie que no le gusta? anonymous, hay mejores cosas que hacer en la vida...............
en cuanto a Lost. bueno es Lost. te gusta o la odias. creo que no hay termino medio. y en cuanto a respuestas. mmm.....alguna darán, supongo. tampoco demasiadas que hay que hacer peli y todo eso. pero llegado a este punto, uno quiere tantas respuestas, como saber como terminan los personajes. personajes, algo que no tiene Flashforwad, por ejemplo.
y Gallactica es muy buena. para mi gusto es demasiado discursiva y no soy muy fan del todo (aún así soy capaz de dalme cuenta que la serie mola). y ese final...........

Arual said...

Club de fans de Sawyer ya Ra!!! Jejeje!! Me encantó tu post, no puedo estar más de acuerdo. En cuanto a Gallactica llevo tanto tiempo leyendo que he de verla que al final me tendré que animar...
Anoche vi un trocito de Flashforward y tampoco pinta mal!

la_puta_vaga_de_mierda said...

Estoy a mediados de la cuarta temporada de Battlestar Galactica (a puntito de terminar la serie, vamos) y sí, es buena. Buena y llena de buenorras y macizorros, lo cual es también muy importante. ¡¡Y sale Lucy Lawless!! ¡Qué más se puede pedir!