Monday, December 29, 2008

Resumen de temporada

El año 2008 llega a su fin y, como de costumbre, toca hacer un resumencito de lo vivido, pero esta vez desde una óptima más personal y no tan "de país", que para eso están los dominicales. Ha sido un buen año 2008. Empecé con un propósito bien definido, encontrar trabajo (uno que no me desquiciara, frustrara y enloqueciera), y lo conseguí. Además he viajado mucho, no muchísimo pero sí mucho más de lo que esperaba o tenía en mente. Ya está. Bueno, como así queda un poco breve, echemos la vista atrás para recordarrrr:
En enero me voy a Berlín en buena compañía a deleitarme con los bares con rollo y con rollaco. El restaurante vietnamita nos decepciona, pero el currywurst encandila.
En febrero voy a esquiar a Andorra y de road trip a Valencia. Lo flipo en dolby ante el cartel electoral de no sé qué partido en el que se representan a unas ovejas blancas dándole la patada a una oveja negra. Para contrastar, en Altea descubro el agua de Valencia. Y delante del palacio del Marqués de Dos Aguas, me dan una gran noticia.
En marzo voy a Galicia (jojojo) y a pasar unos días a Oporto, donde como bacalao y me dan un masaje maravilloso.
En abril... creo que nada, este mes barcelonino.
En mayo me voy a Lyon a ponerme fina en los bouchones y hablar de todos los temas de los que he hablado en los últimos dos años pero en cuatro días.
En junio... pues ahora mismo creo que tampoco. Voy a la playa, a Sitges y al Garraf.
En julio voy a Madrid y es súperguay.
En agosto me voy a Polonia a sumergirme en historia, en pieroguis y sopa de centeno.
En septiembre voy a Andosilla, a vivir el fin de semana más cañí de toda mi vida. Y a Verona, a estar con los amigos y tomar unos cafeses deliciosos.
En octubre vuelvo again a Madrid, que creo firmemente que es la mejor ciudad de Europa. Voy a Port Aventura por primera vez y me lo paso pipa, pero no pienso volver en unos cuantos lustros.
En noviembre, Nueva York, breve pero intenso.
Y en diciembre a Galicia again.
Hacer propósitos para el año nuevo es un poco Bridget Jonesiano de más (a la par que inútil), pero como hacer listas me encanta, paso a relatarlos aquí, aunque luego no los lleve a cabo ni falta que me hace:
- Encontrar una nueva casa que intente, aunque sea difícil, ser tan bonita y acogedora como la actual (este es el único propósito de año nuevo que pienso cumplir sí o sí, y a corto plazo).
- Aprender a hacer sushi.
- No dejar de beber, pero dejar de beber hasta la náusea. No vomitar en las casas de mis amigos. A ser posible, no vomitar en mi propia casa.
- Ser menos vaga y en vez de pasar los domingos de resaca en el sofá, armarme de valor, ducharme e ir a dar cortos y agradables paseos.
- Ir más al cine y al teatro, sobre todo si me invitan.
- No tener relaciones sociables basadas exclusivamente en el fin de semana, sino quedar con gente también por las tardes para tomar algo y hacer recados en compañía y estando sobria.
- Depilarme más a menudo.
- Comer más pescado y verduras y no tantas rufles al jamón.
- Acabar con las grietas.
- Ser un poco más lady y dejar de usar la ropa rota y estropeada, por muy cómoda que me sea y por muy bien que me vea con las converse/cazadora/mallas destrozadas.
- Usar pantalones que no sean exclusivamente vaqueros. Usar más vestidos y faldas.
- Comprar ropa interior bonita y sexy, y no sólo bragotas de algodón con dibujos de caracoles y nubecitas.
- Ser más creativa, trabajadora y constante.
- Leer más libros y no releer la qué me dices o la glamour por pereza.
- Tener algún tipo de actividad casera para mantener mi tiempo ocupado productivamente cuando esté en casa, y no pasar tanto tiempo en el facebook. Tal vez dedicarme al punto de cruz, o bordar con mis iniciales las sábanas y toallas. O hacerle sombreritos y vestiditos a cerillas, como una Briones.
- Viajar más.
- Llamar más a mis padres.
- Ser una buena amiga a la que todo el mundo quiere por su sabiduría y elegancia interior. Estar ahí para escuchar los problemas de los demás. No ser borde, dar problemas ni criticar a la gente. Ser ecuánime.
- Ver Deadwood. Acabar con Mad Men. ¿Ver, tal vez, True Blood?
- Hacer los ejercicios de la espalda y mejorar la postura corporal.
- No quedarme dormida en bares, teatros ni cines.
- No enfadarme por cosas absurdas que no tienen solución, como con la gente que aplaude cuando el avión aterriza, por el uso indiscrimando de la comic sans o con las tonadilleras que dicen "eso es incierto". Ser más paciente, no rabiar, no celarme, ser madura y equilibrada.
- Actualizar más el diario.
Y eso, que feliz año nuevo a todos mis lectorcitos.

Thursday, December 25, 2008

Bailar con mil perritos

Llevo un huevo de pato sin actualizar debido al estrés laboral y personal que me deja la imaginación sequita y produce mermas considerables en mi salud. De repente estamos ya en Navidad, y mi contento hoy es mucho debido fundamentalmente a dos cosas:
Cosa primera: después de muchos años de tradición, mi cena de nochebuena de ayer no consistió en bacalaoconcoliflor (siempre precedido de abundante marisco, eso sí), sino en solomillos con foie ultra deliciosos. Muy bien.
Cosa segunda: ha aparecido el perrito "Trus" (por si no conocen esta historia, se la resumo brevísimamente: un señor viajaba en avión con sus dos perritos en la bodega, y los bastardos malnacidos del aeropuerto de Barajas "accidentalmente" perdieron uno -se supone que la jaula se abrió, los perritos salieron, lograron atrapar a uno, la hembra, pero Trus se perdió-) El dueño llevaba cuatro días acampado en el aeropuerto organizando batidas para encontrar a su perrico, a quien todos, supongo, veíamos ya espanzurrado en la autopista. Pero no, ha aparecido vivito y coleando y ya se encuentra feliz con su abnegado dueño y su compañera perruna. Es la historia más navideña, tierna y hermosa que puedo concebir.